viernes, 3 de abril de 2009

Carles Santos

Lugar: Auditorio Eduardo del Pueyo (zaragoza)
Día: 2-04-08
Aforo: 30-50 personas

Fui porque mi padre siempre me había contado historias extravagantes de este conocido suyo, porque mi hermana insistió y porque llevaba tiempo sin ir a un concierto. Pero un recital de piano de un artista conceptual, vanguardista, provocador, autor de performances,… podía ser muy duro, así que acudí convencido de que me iba a aburrir y de que la sensación final iba a ser de tomadura de pelo.

Pero nada de eso, salio el “abuelo”, se sentó, respiró y comenzó a tocar el piano con fuerza, rapidez acometiendo una pieza tras otra sin descanso. Estas tenían algo de maquinal, frenético, de mantra gracias a los canon que utiliza, con pequeños momentos de calma y melodía que desaparecen abruptamente, con mucho de juego, de tormenta, buscando los acoples y las disonancias (sí, ya lo sé, tocaba el piano).

Utilizó el piano como caja de percusión, toco a bola y mano en lugar de a dos manos y finalizó tocando integramente una pieza con los puños. Un macarra.

Un concierto divertido y estimulante.
¡Viva la gente con personalidad!

3 comentarios:

English Little Pills dijo...

Vaya, ahora me da un poco de rabia qe me pudiera la pereza. La próxima vez será.

johnny 99 dijo...

La pereza no era uno de los siete pecados capitales?.
Si, ahora recuerdo la peli, el primer muerto era la pereza.
Aun podemos aprovechar el viernes.

Me

Anónimo dijo...

pues sí, a mi también me gustó. Y me he quedado con ganas de más.
Influye que el tipo a los 5 años ya tocara el piano. Ser un niño prodigio te permite ser un abuelo macarra.
Me obligaron a estudiarlo, y ahora voy a tener que dar la razón a mi profe de performance... anda que..

Y un albert pla... vamos?

Timón